S'Hotelet de Santanyí

La palabra “hotelet” puede significar pequeño hotel y es cierto que el Santanyí es una antigua casa (con 300 años para ser exactos) con solo cinco suites. Pero es grande en encanto y sofisticación. 

Situado justo en el corazón de un pintoresco pueblo que le da el nombre de Santanyí y cuyo lema es “un sitio como no hay otro”. El pueblo en si es encantador, pero también presume de unos 25 kilómetros de playas y caletas de blanca arena. 

No es difícil encontrar unos recovecos de gran atractivo. Si lo que buscamos es un sitio tranquilo y bien situado donde hospedarnos, el Hotelet de Santanyí es un claro ganador. Ha sido puesto al día de forma elegante, sacando el máximo partido a sus terrazas y a un patio interior que rebosa de paz con sus colores de tonos crema y hueso. 

Respira la belleza natural de la flora de la Mallorca sureña. Las cinco habitaciones han sido bautizadas con el nombre de una planta asociada al hábitat local. De ahí Bruc, Jonc, Lavanda, Caputxina y Olivera, de las que damos una breve descripción. 

Las habitaciones Lavanda y Caputxina se encuentran en la segunda planta junto al hall y pueden transformarse en una zona privada familiar – con el plus añadido de gozar de unas magníficas vistas de los paisajes de Santanyí. 

La habitación Olivera está frente al patio y es independiente del resto de la casa. También tiene buenas vistas y dispone de un solárium particular. 

Encontraremos S’Hotelet de Santanyí en el pintoresco Santanyí, un típico pueblo mallorquín lleno de tradición y ubicado en el sur de la Isla. Existe un gran número de actividades que podemos desarrollar a lo largo del año y nos ofrece unos espectaculares paisajes de la comarca de Migjorn. Las habitaciones restantes – Bruc, Jonc y Lavanda – están en la planta baja e incluyen camas king size, TV, aire acondicionado, cuartos de baño completos y acceso rápido a internet.